MEMORIA INFORMATIVA Y PROPOSITIVA

CAPITULO 2. EXAMEN Y ANALISIS DE LAS ALTERNATIVAS DE PLANEAMIENTO. JUSTIFICACION DEL MODELO

En el planeamiento general que se desarrolló en España en la década de los años 60 y en la primera mitad de los 70, que tenía sus referencias en la técnica y metodología del "plan de estructura" anglosajón, se aplicó profusamente el método de evaluación de alternativas como fundamento técnico de la adopción de decisiones. La reforma que se hace en 1975 de la Ley del Suelo asume pues esta cultura real, y la consolidó como legitimación de las grandes decisiones de planeamiento urbano. Téngase en cuenta que la Ley de 1975, promulgada antes de  la restauración de la democracia, solo podía legitimar en procedimientos tecnológicos las decisiones y opciones principales de desarrollo de las ciudades, aún cuanto el método de evaluación de alternativas estaba declinando en los países de donde se había importado. Su abandono corría en los años 70 paralelo a la deslegitimación de la planificación regional, y a la puesta en cuestión de los métodos de evaluación econométrica del tipo costo/beneficio. Ello no significaba una renuncia a la transparencia del proceso decisorio, sino una sustitución de métodos exclusivamente tecnológicos (asignación de parámetros, cálculos matriciales para reducción de la complejidad, operativos deductivos cuantitativos, etc.) por procesos de explicitación de las opciones, debate y confirmación o sustitución. Ello no es en definitiva sino un método de ida y vuelta (feed-back en la terminología regionalista de los 60) donde el proceso decisorio puntual según valoraciones automatizadas de parámetros es sustituido por un proceso temporal. La ventaja de este último es que reduce su apartado matemático, e introduce la participación pública sin merma de la capacidad de razonamiento sobre las opciones posibles.

Este es el procedimiento que se ha instalado definitivamente en España desde el inicio del planeamiento urbano democrático en el año 1989. Apoyándose en la regulación del proceso de planeamiento por la Ley del Suelo según una secuencia de hitos, es decir, de etapas que sucesivamente van eligiendo y concretando opciones, la práctica ya inveterada tras más de quince años de cultura participativa de la planificación urbanística, consiste en un mecanismo de opción secuencial que, como mínimo, consta de cinco momentos/etapas decisorios (formulación de criterios y objetivos para elaborar el Plan; avance del Plan; valoración de resultados de la participación y reformulación de criterios y objetivos; aprobación inicial; y aprobación provisional); todo ello antes de la aprobación definitiva. Y aún con frecuencia, el proceso se alarga y subdivide, cuando las decisiones por etapas no alcanzan legitimación suficiente, y han de ser reconsideradas las opciones de la etapa anterior. Este es el caso de este Plan de Málaga, donde las etapas comprendidas entre la formulación de criterios y objetivos, entre el Avance y la Aprobación Provisional, se han incrementado con otras dos, por repetición de los momentos participativos, lo que ha dado lugar a reconsideraciones de criterios y soluciones y a las consiguientes reelaboraciones de los contenidos del Plan.

Ha resultado de ello un barrido de opciones realmente inusual en toda la experiencia española de planeamiento, así como un proceso técnico y público de evaluación y depuración de alternativas, del que es suficientemente expresiva la documentación que consta en el Expediente de formación del plan, así como de sus procedimientos decisorios, enriquecidos más allá de los actos plenarios corporativos por el trabajo de Comisiones de Seguimiento mixtas de técnicos y representantes de la Corporación municipal y otras entidades ciudadanas, cuyas actas reflejan sobradamente las alternativas, su valoración y los fundamentos de las decisiones.

Por el carácter sintético de esta Memoria, reflejamos aquí un resumen de las opciones que se han contemplado en algunos de esos hitos de la formación del Plan, expresadas en el orden temporal del proceso de corrección y selección que se ha descrito como método de elección del modelo del Plan y de sus contenidos.

Se comparan a continuación las diferentes opciones sobre el Modelo del Plan, sus principales determinaciones y las Actuaciones singulares en los cinco hitos clave del proceso de elaboración/decisión del Plan. Cada una de tales alternativas ha quedado justificada y fundamentada en el documento correspondiente a la etapa de que se trata. El proceso decisorio por el que se pasa de una a otro opción, o se confirman, está también documentado, en cuanto que se ha reflejado en los siguientes documentos, en cada etapa:

En los trámites de participación pública y de seguimiento institucional del Plan se han confirmado las opciones de limitar los contenidos de la Revisión a la actualización y los ajustes instrumentales del Plan de 1983, y a la vez atender a las grandes oportunidades de desarrollo sobrevenidas en los últimos diez años, seleccionando las opciones más importantes con sentido estratégico.

Tal enfoque ha supuesto, en síntesis:

Valorando las propuestas contenidas en los documentos de planeamiento anteriormente elaborados (Documentos de Criterios y Objetivos, Avance y Documento de Aprobación Inicial), y ponderándolas con los criterios expuestos en el párrafo anterior, se ha elaborado el Documento que se presenta aquí. Por tanto, el modelo territorial, que ha ido decantándose por sucesivas aproximaciones técnicas y debates ciudadanos, resulta finalmente del doble criterio, sintéticamente expresado, de:

A esta doble opción corresponde el Documento revisado del Plan aquí contenido.