Entre las herramientas y metodologías de mejora que se utilizan se destacan:

1. Misión, Visión y Valores: Definen el propósito de los departamentos municipales, su visión de futuro y los principios que guían su actuación. Permite reforzar la identidad institucional y orientar todas las actividades hacia objetivos comunes.
2. Mapa de Procesos: Por medio de un esquema detallado, se definen cómo se desarrollan las actividades municipales, permitiendo identificar las relaciones entre los procesos clave. Permite una gestión eficiente y asegura una comprensión clara de cómo se realizan los servicios a la ciudadanía.
3. Análisis de las Partes Interesadas: Se identifican los grupos que interactúan con los departamentos municipales (ciudadanos, empleados, empresas, etc.), así como el análisis de sus expectativas. Permite priorizar acciones que respondan directamente a las necesidades de cada grupo.
4. Evaluación de Riesgos: Identificación, análisis y mitigación de riesgos en los procesos y servicios municipales. Se busca garantizar la continuidad del servicio público y minimizar los impactos negativos.
5. Benchmarking: Comparación de prácticas municipales con otras organizaciones líderes para identificar oportunidades de mejora. Permite impulsar la innovación y adaptar las mejores prácticas al contexto del Ayuntamiento.
6. Simplificación Administrativa: Reducción de trámites y burocracia para ofrecer servicios más ágiles y accesibles. Se busca facilitar la relación entre la ciudadanía y el Ayuntamiento, mejorando la experiencia del usuario.